El tiempo se ha convertido en la gran obsesión de los profesionales del siglo XXI, o mejor dicho la gestión inteligente del tiempo.
Conciliar la vida laboral y personal siendo productivo es un anhelo de cualquier profesional de éxito. En el mundo actual queremos conciliar la realidad de que todo va muy deprisa y la exigencia es máxima, con el deseo (la necesidad diría yo) de mantener controlado el estrés y disfrutar del ocio y la vida personal.
Por ello solo caben dos opciones, un gran premio de la lotería o una excelente gestión del tiempo.
En lo primero no podemos ayudarte, pero para lo segundo te contamos los 6 mejores consejos que siempre funcionan.
Además, ahora con la normalización del uso de herramientas de Inteligencia Artificial parece que esperamos que éstas nos solucionen todos los problemas, incluido por supuesto la gestión del tiempo.

Y qué duda cabe de que la IA es una gran ayuda. Una herramienta que te puede resumir textos o reuniones, traducir información de casi cualquier idioma, agilizar la elaboración de presentaciones, proponerte ideas, facilitar el uso de Excel, generar imágenes, recordarte citas y eventos o contestar correos automáticamente, entre otras utilidades.
Pero seguiremos teniendo que aplicar nuestras propias técnicas y estrategias de gestión del tiempo, porque, al igual que el tiempo era limitado y escaso en 1973 cuando yo nací, el tiempo seguirá siendo limitado y escaso en 2025, solo que ahora estas herramientas, y todas las que tenemos ya (imagínese no disponer de email y tener que enviar correos postales) lo que nos permiten es ser enormemente más productivos.
Y cuidado, porque además junto con sus beneficios, también traen sus amenazas, y una de ellas es la de ser una puerta a “distraernos”. Piense en las veces que una búsqueda de información en internet acaba siendo mucho más larga de lo que debió ser o nos llevó de una cosa a otra y… 25 minutos curioseando cosas sin ningún valor, pues con ChapGPT también.

Por ello te resumimos los 6 trucos esenciales para ganarle tiempo al tiempo.
- Prioriza correctamente
Todo el día nos pasamos eligiendo a qué tarea nos aplicamos. Si esas elecciones no se hacen con el criterio correcto, simplemente estaremos trabajando mal porque no es la tarea que debería estar haciendo.
Cada vez que no te aplicas a lo que es importante (es decir a lo que tiene que ver con tus resultados) y caes en el error de trabajar simplemente en lo urgente (sin pensar si es importante o no), o en la tarea que más te gusta hacer, o en la tarea que te acaba de entrar por email, o en algo que te ha pedido alguien sin más, o en lo que te resulta más fácil, estás cometiendo el error de la mala priorización.
Si lo piensas un poco, es totalmente evidente que no todas las tareas son iguales y por tanto no es igual hacer unas antes que otras, dedícate siempre a las importantes, las que dan tus resultados y tus resultados mejorarán notablemente.
Además, nunca pierdas de vista esta pregunta, ¿cúando es necesario tener cada tarea terminada?, la respuesta nos llevará directamente a la cara B de esta moneda. La planificación.
- Planifica y cumple tu planificación
Planificar es la consecuencia de Priorizar. Y planificar correctamente, es la consecuencia de priorizar correctamente. No solo es escribir una lista tareas en una aplicación de tu teléfono, en tu herramienta de planificación de IA, en una hoja de tu agenda o un post-it si eres de la vieja escuela.

La planificación es un compromiso personal, es una obligación respecto al cumplimiento de la misma. ¿De qué sirve planificar tareas si no las cumples?
El cerebro humano está pensado para la supervivencia y por tanto para lograr el mayor ahorro posible de energía y esfuerzo. Por eso, procura descomponer los proyectos en tareas más pequeñas e incluso las tareas en subtareas, de esta manera no se sentirá bloqueado ante el tamaño de lo que tiene que hacer.
Además, un beneficio adicional de descomponer el trabajo en tareas más pequeñas es que se podrán realizar en periodos más cortos de tiempo y sentirás la alegría de la tarea terminada, lo que te animará para la siguiente, un poco de dopamina nunca viene mal.
Por otra parte, no tengas miedo a “replanificar”, es normal, ya que el día a día suele estar lleno de imprevistos, cada vez que mires el correo, el Teams, o surja una nueva tarea es muy posible que haya que modificar alguna de las que estaban planificadas, no te desanimes.
Y por supuesto, nunca planifiques el 100% de tu jornada, procura dejar espacios yermos de tareas en los momentos que habitualmente más imprevistos surgen, así tendrás menos sorpresas y cambios.
En definitiva, planificar es el resultado de una actitud continua de reflexionar y escribir, con visión a corto, medio y largo plazo y siempre planifica teniendo en cuenta lo que veremos en el siguiente consejo, pero eso será en unos días, si quieres verlo apúntate en la agenda entrar de nuevo en este post.
Si estás interesado en saber más sobre Gestión del Tiempo no dejes de echar un ojo a nuestra formación en Gestión del Tiempo para empresas
