Cuando parecía que habíamos recuperado los niveles de crecimiento de la larga crisis económica de la década de los 10, y cuando parecía que salíamos de la pandemia, ahora nos volvemos a encontrar en una situación que genera algo más que incertidumbres de cara al futuro.
La guerra de Ucrania, dejando a un lado la dramática situación que provoca una guerra con las pérdidas humanas que implica, nos lleva a varias consecuencias negativas como subidas de precios de recursos energéticos, escasez de productos alimenticios de primera necesidad que provocan desabastecimientos de productos derivados de aquellos e incluso escasez de recursos esenciales para la producción de componentes tecnológicos como el Paladio.
Es decir, una situación complicada. Ahora bien y, sabiendo que esto con toda probabilidad no va a suponer la extinción de la especie humana de nuevo, algunos saldrán más fuertes y otros no saldrán o lo harán muy mermados para el futuro.
¿Qué podemos hacer ante este panorama?
Opción 1
Me dejo llevar por el pánico y cierro la empresa si soy una Pyme, o empezamos a despedir gente para controlar el gasto de personal y pierdo competitividad, o si soy un empleado, espero agazapado a que llegue un día la llamada de teléfono para ir al despacho de personal a recoger mi carta de despido.
Opción 2
Me preparo para la nueva situación, estudio qué oportunidades se van a producir y entre otras cosas, invierto en formación una parte de mi presupuesto, o analizamos bien la situación y el equipo que tenemos en la empresa para elegir formaciones que hagan que los empleados se sientan valorados y además adquieran herramientas profesionales útiles para la nueva situación y las nuevas oportunidades que van a surgir, o si soy un empleado me analizo para saber en qué me puedo formar y dedico parte de mis recursos a ello para ser competitivo en el nuevo escenario y aprovecho las oportunidades que van a surgir.
Por supuesto hay más cosas que hacer no todo es formar y formarse, pero la, llamémosla así, cultura de la formación, es algo que se debe valorar porque sin ella lo más probable es que el rumbo que tome la situación sea más difícil e incierto si cabe.
¿Has pensado en qué puedes mejorar de cara esta nueva situación?, si quieres estamos a tu lado para ayudarte a hacer que el futuro tenga menos nubes negras.
SDS Training, estamos aquí para ayudarte a mejorar.